Si algo está claro cuando apostamos en cualquier sitio es que nuestra finalidad es ganar apuestas y con ello dinero o puntos dependiendo de dónde juegues.
Ahora bien, ¿tenemos claro qué es lo mejor para poder ganar apuestas y ser jugadores ganadores a largo plazo? Ya que hay que recordar y tener en cuenta que la mayoría de apostantes a largo plazo son perdedores.
En este post queremos brindarte algunos consejos que pueden serte de ayuda para tener claro -seas un apostante habitual o casual- qué es lo que estás haciendo y a tener un autocontrol de tus jugadas.
En qué mercados apostar
Algo que sin duda diferencia a los apostantes ganadores de los perdedores es el mercado o los mercados en los que se apuesta, tanto a nivel de deportes como a nivel de tipo de apuesta.
Tal vez pueda parecer un golpe de realidad, y no es para menos, pero debemos pensar en frío y sobre todo estudiar minuciosamente en qué somos realmente buenos.
Puede ser que te guste el fútbol pero no seas bueno prediciendo resultados, o tal vez tu habilidad no está en apostar a quién va a ganar el partido si no a cuántos corners van a haber durante el encuentro o las tarjetas que va a sacar el árbitro en todo el partido.
Tenemos que encontrar tanto el deporte en el que más apuestas ganemos, como el mercado dentro de ese deporte (handicap, corners, tarjetas, aces, más/menos de…) y afianzarnos en ese mercado mejorando nuestra habilidad sin salirnos de nuestra especialidad.
El corazón y las apuestas
Otro gran fallo cuando tenemos como objetivo ganar apuestas es dejarnos guiar por el corazón y no por la cabeza, llevándonos a perder mucho dinero incluso sabiendo que no deberíamos de haber realizado dicha apuesta.
Si queremos ser ganadores a largo plazo debemos pulir al máximo cosas como esta, debemos olvidarnos del corazón y utilizar la cabeza y esto en la mayoría de casos puede significar no apostar en ningún caso en aquellos partidos en los que juegue nuestro equipo.
Y es que no hay que equivocarse y pensar que apostar a favor de tu equipo significa que estás usando el corazón, el hecho de que pienses que van a marcar un gol, que van a sacar más corners o que van a perder el partido podrían llevarte a cometer un error, ya que siempre tendemos a exagerar lo que vemos de algo de lo que somos fanáticos.
Gestión de bank
Y para terminar, uno de los factores más importantes si no el que más dentro de las apuestas deportivas cuando buscamos ser ganadores a largo plazo, recuerda, el objetivo siempre es ganar a largo plazo y no fijarse tanto en el corto.
El primer error y más común es no tener una gestión de nuestro bank (dinero destinado a nuestras apuestas).
La gestión de bank tiene como objetivo hacer que no perdamos dinero en el largo plazo si somos ganadores y que le demos un sentido financiero a nuestras apuestas en base a las posibilidades que le damos a un evento de que ocurra.
Existen muchos tipos de gestión de bank, más complejas, más sencillas y sobre todo más o menos agresivas lo cual aumenta o disminuye el riesgo a que perdamos todo.
En este caso vamos a ver una gestión de bank estándar que a su vez es aplicada por la mayoría de tipster profesionales.
Esta estrategia consta de 2 pasos:
Paso 1: Definir el stake
Lo primero que debemos hacer para poder llevar a cabo nuestra gestión de bank es definir el stake que vamos a utilizar, ¿cuánto dinero es una unidad?
Esto se hace principalmente para perder la sensibilidad al dinero y trabajar de forma más rápida y sencilla que multiplicando dinero real, además que podrás entenderte en este lenguaje con otros apostantes.
Una unidad/stake consiste en una cantidad de dinero que representa un porcentaje del 100% de tu bank.
Estas cantidades suelen ser 0,50% o 1% (menos y más agresiva respectivamente).
Por ejemplo, en un bank de 100€ serían 0,50€ o 1€.
Paso 2: Definir las probabilidades
Ahora tenemos que definir el stake que usaremos para cada caso del 1 al 10 dependiendo de las posibilidades que nosotros veamos que tiene de salir el resultado, al final, todo depende de nosotros y la gestión de bank no es más que una forma de autocontrol, debemos ser nosotros mismos los que con cabeza fría nos concienciemos de que tenemos que seguirlo a rajatabla.
Los stakes por lo general se definen de la siguiente forma:
Stake 1: Hasta el 10% de posibilidades – Apuestas muy poco probables
Stake 2: Hasta el 20% – Probabilidades bajas
Stake 3: Hasta el 30% – Posibilidades decentes, se suele usar con cuotas medio-altas
Stake 4: Hasta el 40% – Normales, por lo general estaremos en este rango
Stake 5: Hasta el 50% – Normales, por lo general estaremos en este rango
Stake 6: Hasta el 60% – Normales, por lo general estaremos en este rango
Stake 7: Hasta el 70% – Empieza a ser alto, tenemos que estar seguros de la apuesta
Stake 8: Hasta el 80% – Alto, se utiliza para jugadas en las que tenemos un estudio muy exhaustivo y confiable de la apuesta
Stake 9: Hasta el 90% – Cantidades altas, apuestas muy muy seguras, generalmente irá acompañado de cuotas muy bajas
Stake 10: Hasta el 100% – Solo usar en casos extremos, por lo general este stake solo se utiliza para partidos amañados teniendo la información de primera mano
Juntando ambos puntos, podríamos establecer un patrón para apostar por posibilidades que nosotros damos a cada apuesta.
Por ejemplo, apostar stake 6 a que el Barcelona gana al Atlético de Madrid este fin de semana.
Significaría que apostaríamos el 3% o el 6% de nuestro bank, según hayamos elegido, y que para nosotros este resultado tiene unas posibilidades del 60% de salir.
Y hasta aquí llegan nuestros consejos para apostar, en playfulbethacks.com podrás encontrar más medidas a tomar para aprender a apostar correctamente.